Pierluigi Collina, presidente de la Comisión de Árbitros de la FIFA, ha descrito este lunes las últimas pruebas que se harán para la detección semiautomática de los fueras de juego. Lo explico durante el último episodio del magazine ‘Living Football’, en el que también ha confirmado que la prueba durante la Copa Árabe supone “el ensayo más importante hasta la fecha” y en caso de ser exitoso se utilizará también en el Mundial 2022, celebrado en Qatar.
¿Cómo funciona?
Este sistema consta de cámaras en el techo del estadio. Gracias a los datos de seguimiento, se quiere conseguir que un operador, sentado detrás de muchas televisiones, reciba en directo tanto la línea de fuera de juego, como el momento en el cual se ha golpeado el balón. Este entonces tendrá la opción de enseñarle dichas imágenes al árbitro encargado del VAR.
Aun así, se ha confirmado que cada jugada tendrá que ser revisada por un humano para no equivocarse en casos excepcionales. "La tecnología es muy importante y útil tanto en la preparación del partido como en el proceso de toma de decisiones durante los partidos", dijo el jefe de los árbitros, Pierluigi Collina. "En un incidente de fuera de juego, la decisión se toma tras analizar no solo la posición de los jugadores, sino también su participación en la acción. La tecnología puede trazar una línea, pero la evaluación de una situación sigue estando en manos del árbitro".
Esta nueva medida, aparte de disminuir el error humano, también tiene como objetivo reducir el tiempo que hay entre que ocurre una jugada y el momento en el que los árbitros anuncian su veredicto final respecto a dicha jugada. Esto sería muy útil en casos como el del pasado sábado, durante el Villarreal-Barça, en el que se tuvo que esperar varios minutos para confirmar que no había habido fuera de juego de Memphis en el primer gol culé.