El pianista y empresario musical George Wein ha muerto a los 95 años de edad, mientras descansaba plácidamente en su cama, según ha comentado su familia. Fue una figura clave para entender los festivales de música moderna al cofundar los festivales Newport Jazz y Newport Folk, dos hitos claves en el desarrollo de la música en EEUU.
George Wein llevó una vida con la que soñarían la mayoría de los músicos. De pequeño fue un niño prodigio, en su adolescencia ya tocaba el piano de manera profesional en Boston y de adulto dirigió el club Storybille. Por su club pasó gente clave para la escena Folk estadounidense como Odetta, Josh White o Joan Baez.
En 1954 cofundó el Festival de Jazz de Newport, un evento que definiría los festivales al aire libre tal y como lo conocemos ahora.
George Wein era mucho más que un promotor musical. Mantenía una estrecha relación con los músicos, se preocupaba por ellos y por cómo les iba. En la primera edición del festival se las ingenió para organizar una reunión entre el saxofonista Lester Young y la cantante Billie Holiday. Ambos músicos habían sido colaboradores, pero llevaban años sin hablarse. Gracias a la reunión de George Wein, ambos músicos volvieron a entablar relación.
En la siguiente edición, Wein contrató a Miles Davis en un momento en el que estaba contra las cuerdas. Esta actuación le sirvió para iniciar su carrera y llegar a ser la leyenda en que se convirtió. El festival ayudó a que el jazz se convirtiera en la forma de arte estadounidense aceptada que es hoy en día.
A finales de los 50, Wein se dio cuenta del resurgimiento de la música folclórica que triunfaba entre los estudiantes universitarios de Boston. Newport Folk Festival se convertiría en una parte sustancial de la historia de la música. Allí, en 1963, Joan Baez presentó a un joven Bob Dylan a su mayor audiencia hasta la fecha. Dos años más tarde, también en Newport, Bob Dylan rompería con el purismo folkie volverse eléctrico. Lo que siguió con Bob Dylan, más que historia, es leyenda.
La popularidad de Newport lo llevó a fundar su propia productora. De ahí se trasladó a Nueva Orleans, donde fundó el Jazz and Heritage Festival, cuyo concepto se exportó a todo el mundo.
No solo creó los festivales de Folk y Jazz de Newport, si no que los salvó. En 2007, Wein se retiró para disfrutar de una merecida jubilación, dos años después, ambos festivales estaban arruinados. Con 82 años, Wein volvió para crear una fundación sin ánimo de lucro para salvar y proteger ambos festivales.
En una entrevista en 2004, Wein dijo que su verdadero talento era conseguir que las cosas sucedieran. Y eso hizo durante más de medio siglo.
