Siento que hemos hecho el ridículo otra vez en Eurovisión

Vigésimo terceros. 61 puntos. Otro batacazo en Eurovisión. Amaia y Alfred nos han hecho viajar a la luna, tener esa mente viajera… pero siendo realistas. Su canción, tu canción, nuestra canción no ha funcionado. No había clímax. Todos nos hemos preguntado: ¿esos horrendos tonos ocres quién los ha elegido? Hemos quedado peor de lo que nos merecemos. En serio. Dejadme que me explique. Amaia y Alfred son de los mejores intérpretes del Festival. Cuenten conmigo. A mí me salen cinco quizá seis, y a su nivel. Amaia y Alfred tienen ese talento especial que antes hipnotizó a la audiencia. Ellos, no lo olviden, formaron parte de ese efecto arrebatador que se creaba cada lunes en TVE. El aire fresco del nuevo OT no se ha visto en Lisboa. Ellos impecables pero los que les rodea... Europa debía sentarse delante del televisor y querer desear, devorar, saber más de la historia de amor de 'Almaia'. Esa relación que España conoce. Descubrir por qué España les eligió. Cantar que ya no vale con sólo intentarlo. Querer ganar de verdad Eurovisión para que no vencieran los que decían: "No era la balada romántica adecuada". Pamplinas. ¿Lo malo? ‘Tu canción’ era el tema perfecto pero lo hemos infrautilizado. No hemos cuidado la escenografía. Como siempre. Y si no, miren a Lituania.

Nunca llegue a imaginar que la puesta en escena fuera esa. Lo han puesto todo al revés. Tenía que haber brotado la Amaia que endulza la piel. La de 'Shake it Out', la de 'Love on the brain'. Hacer sentir a Europa que estamos junto a ellos. Seguir sus pies. Teníamos que haber convertido a Amaia en nuestra diva. Porque ha vuelto a ganar otra: Netta. No es como Dana International, ni como Helena Paparizou, ni como Ruslana (la mejor) ni siquiera como Loreen. Incluso, ni como Eleni. Pero era la favorita. Y lo ha demostrado. Congratulations Israel. Siento que lo hemos desaprovechado otra vez. Amaia y Alfred tenían esas voces que nos podían hacer sentir que España ganaba por primera vez. No pudo ser. No se ha podido honrar el 'La, la, la'… Y por favor, dónde estaba ese beso final.