El cambio en las costumbres de movilidad en las ciudades hacia un modelo más sostenible no está pasando desapercibido para los tradicionales fabricantes de medios de transportes privados.
En este sentido, la compañía italiana Polini, especializada en la fabricación de motocicletas y accesorios relacionados, ha apostado por desarrollar elementos electrónicos para aquellos medios de transportes de propulsión manual, empezando inicialmente por las bicicletas.
Con ello en mente, y casi cinco años de investigación y desarrollo, sus ingenieros han creado un propulsor ligero y compacto denominado E-P3, que dispone de sensor de par, de velocidad y de cadencia en el pedaleo, cuyo control estará disponible a través de una unidad de gestión.
Acorde a Polini, según se hace eco la publicación AS, el propulsor permite un funcionamiento bastante suave, permitiendo una actividad de pedaleo sencilla y ligera, contando con cinco modos de utilización que permite multiplicar los esfuerzos de los ciclistas de entre 30% a un 400%.
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Se sabe además que incluye una batería de serie de 500Wh, aunque Polini ha permitido que se pueda incluir una segunda unidad de batería, permitiendo no solo duplicar esa capacidad sino además ofrecer una extraordinaria autonomía de hasta unos 240 kilómetros, al menos sobre el papel y para circunstancias de pedaleo normales, luego habrá que verlo en la práctica.
Y para verlo en la práctica, Polini ha seleccionado la española Berria como una de las primeras fabricantes de bicicletas, que ofrecerá una gama de bicicletas eléctricas con el propulsor de Polini, uniéndose a otras gamas de bicicletas eléctricas que ya dispone.