El derbi sevillano de Setién y Caparrós

Estos días tienen que ser buenos para estarlos viviendo en Sevilla. En realidad todos los días son buenos para vivir en Sevilla, pero estos más porque se avecina un ‘derbi’ con mucha miga. Tras años en los que el Betis ha sufrido ante un Sevilla pujante, vuelve una rivalidad que llevaba un tiempo desmereciendo. Un poco como pasó en Madrid, ¿recuerdan?, con tantos años sin que el Atlético le ganara al Madrid, hasta dar lugar a aquella pancarta de ‘se busca rival digno para derbi decente’. Aquello lo remedió Simeone, que le devolvió a la ciudad un picante que estábamos empezando a echar muy en falta los aficionados al fútbol.

Si en el Atlético fue Simeone, en el Betis ha sido Setién, con su fútbol bien construido. Goleó a domicilio al Sevilla (3-5, en un inolvidable Día de Reyes), tiene asegurada la presencia en Europa y le basta un punto para no ser séptimo, puesto que obliga a tres eliminatorias previas en la Europa League de las que quinto y sexto están exentos. Por contra, el Sevilla lucha por esa séptima plaza y necesitaría un punto para asegurarse depender de sí mismo la última jornada. Ganando hoy, aún podría aspirar a quedar por encima del Betis. En febrero, el hoy defenestrado Montella dijo “quedar detrás del Betis no es una opción” y eso ha creado mucha guasa.

El Betis anda bien, pero le faltan sus dos primeros porteros. Adán y Dani Giménez, y está jugando con el canterano Pedro, que hasta ahora ha respondido bien y hoy pasa su gran prueba. Al Sevilla lo ha reavivado Caparrós, que lleva dos victorias en dos partidos. Ha levantado el ánimo del grupo, por la vía simple del agrupamiento atrás, el balón largo y luchar metro a metro. Hace tiempo que no se esperaba con tanta pasión un derbi sevillano, que esta vez viene además acompañado del de las chicas, colocado este domingo con ojo oportuno por Tebas, que así las eleva a un primer plano. En fin: días para estar en Sevilla.