Claire Cavanah y Rachel Venning son las fundadoras de Babeland, una sex shop en Seattle; dijeron que el We-Vibe Sync se convirtió en el vibrador más vendido este año. El juguete, que parece más un control de video juego que un vibrador, está diseñado para estimular simultáneamente el punto G y el clítoris, y por lo tanto aumenta el potencial para que las mujeres lleguen al orgasmo. Sólo está disponible en dos colores (azul agua y morado), sus vibraciones se pueden sincronizar con tu música, cuesta más o menos $200 dólares (3,700 pesos), y no parece pene en absoluto.Este vibrador no es el único. También está el Hitachi Magic Wand, tal vez uno de los juguetes sexuales femeninos más famosos del mundo, un masajeador que parece más una baqueta enorme que un estimulador de clítoris. Aquí puedes ver una lista de la revista Cosmopolitan de los 14 mejores juguetes sexuales para mujeres y te encontrarás con creaciones futuristas como el suave y ovalado Mimi Soft o el Picobong Transformer antes de llegar a los dildos más realistas como el Morning Wood.Cuando comparas los juguetes sexuales para mujeres más comunes con los de los hombres, surge un tema muy claro; a excepción de algunos, los juguetes sexuales femeninos no se parecen al pene en absoluto, mientras que los masculinos pretenden imitar la apariencia y textura de la vagina lo más que se pueda. ¿Por qué? La respuesta está en las diferencias entre la biología y la psicología de ambos sexos. Y tal vez también en las suposiciones antiguas de lo que un hombre quiere comprar.La equivalencia del Magic Wand para hombres sería el Fleshlight, su textura es casi como la carne humana. Entre otras opciones más esotéricas que nos ofrece la compañía está el "Pink Lady Original" que viene en tres formatos: vagina, ano o boca.
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También está la línea Fleshlight Girl, una de las más vendidas. No son tan diferentes a los productos comunes y corrientes, excepto que estos orificios tienen el molde de personas reales, para ser más específica tienen la forma de los genitales de las estrellas porno."Es un proceso complejo que nos permite recrear las áreas más íntimas del [modelo] para que los fans disfruten y al mismo tiempo tengan la certeza de que es lo más parecido a lo real que pueden llegar a tener", dijo Kristen Kaye, representante de relaciones públicas de la compañía. "La estética, el sentimiento, la calidad y la fantasía son muy importantes para nosotros, y la atención al detalle nos ha funcionado bastante bien".En 2008, Brian Sloan inventó el Autoblow, "el primer robot de mamadas del mundo". "Lo atractivo de mis juguetes sexuales masculinos es lo realista", dijo Sloan. Al igual que el FleshLight, el Autoblow se moldea según la anatomía de una mujer real. A diferencia del Fleshlight, él decidió quedarse con modelos normales en lugar de estrellas porno. Hoy en día, Sloan ha enviado más de 100.000 pedidos a 30 países diferentes.Según el Dr. Michael Aaron, terapeuta sexual con sede en Nueva York y autor de Modern Sexuality: The Truth About Sex and Relationships, el énfasis en el realismo entre los juguetes para hombres no es del todo sorprendente. "En mi práctica clínica, me he dado cuenta de que mis clientes masculinos son más propensos a fantasear durante el sexo y que el elemento visual es esencial", dijo. Por otro lado, las mujeres tienden a centrarse en la sensación para llegar al orgasmo. "Mis clientas han sido más propensas a concentrarse en las sensaciones físicas", continuó. "Puede ser que necesiten un juguete que les dé el tipo específico de sensación física que están buscando".
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A principios de este año, el Womanizer se convirtió en el segundo juguete más vendido de Babeland entre las mujeres. A primera vista, parece más un arma que te encontrarías en el planeta Tatooine que algo que te gustaría poner alrededor de tus genitales, probablemente porque usa la presión del aire para estimular el clítoris en lugar de la vibración más tradicional.Pero la mayoría de las mujeres eventualmente aprenden que las apariencias no son lo más importante. De las 200 mujeres que probaron el producto, el 50 por ciento logró alcanzar el orgasmo en 60 segundos o menos, según un portavoz de la compañía, 80 por ciento se tardó entre dos y tres minutos. Tres cuartas partes dijeron que eran capaces de experimentar múltiples orgasmos.Todo se reduce a que la función de los juguetes sexuales para las mujeres, le ganan a la forma. Muchas investigaciones han demostrado que existe una brecha de orgasmos entre hombres y mujeres; la investigación también ha demostrado que las mujeres tienen más probabilidad de llegar al orgasmo masturbándose que teniendo sexo. Esto quiere decir que mientras los hombres quieren que su experiencia al masturbarse sea lo más parecido al sexo, las mujeres buscan algo en los juguetes que muchas veces el sexo no les puede dar: un orgasmo.Pero hay algunos en la industria que tienen ideas diferentes en cuanto a por qué los juguetes de aspecto realista siguen dominando el mercado masculino. "El mercado de los juguetes sexuales para hombres no es muy sofisticado", dijo Stuart Nugent, gerente de comunicaciones de marca de LELO, una fábrica de juguetes sexuales de lujo. "Los productos anatómicos prevalecen porque los diseñadores de juguetes sexuales para hombres no se preocupan igual que por los juguetes sexuales femeninos, lo que significa que el mercado parece ser impulsado por la demanda de dispositivos anatómicos, pero la verdad es que es impulsado por los fabricantes, no por los clientes".
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A diferencia de otros fabricantes, LELO no ofrece diseños "realistas". De hecho, algunos de los más vendidos están diseñados para estimular áreas que no están en el pene y que la comunidad heterosexual ha considerado tradicionalmente como "fuera de los límites". El HUGO, el primer masajeador de próstata, ha superado en ventas a las compañías con diseños más clásicos."Esto demuestra lo que ya sabíamos: si muestras cierto respeto por los juguetes sexuales masculinos, los hombres responderán positivamente", dijo Nugent. Y con suerte, a su debido tiempo, dejaran de parecer genitales encerrados en tubos y empezaran a tener diseños más avanzados que den el placer que ambos sexos se merecen.Sigue a Carrie Weisman en Twitter.
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También está la línea Fleshlight Girl, una de las más vendidas. No son tan diferentes a los productos comunes y corrientes, excepto que estos orificios tienen el molde de personas reales, para ser más específica tienen la forma de los genitales de las estrellas porno.
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A principios de este año, el Womanizer se convirtió en el segundo juguete más vendido de Babeland entre las mujeres. A primera vista, parece más un arma que te encontrarías en el planeta Tatooine que algo que te gustaría poner alrededor de tus genitales, probablemente porque usa la presión del aire para estimular el clítoris en lugar de la vibración más tradicional.Pero la mayoría de las mujeres eventualmente aprenden que las apariencias no son lo más importante. De las 200 mujeres que probaron el producto, el 50 por ciento logró alcanzar el orgasmo en 60 segundos o menos, según un portavoz de la compañía, 80 por ciento se tardó entre dos y tres minutos. Tres cuartas partes dijeron que eran capaces de experimentar múltiples orgasmos.Todo se reduce a que la función de los juguetes sexuales para las mujeres, le ganan a la forma. Muchas investigaciones han demostrado que existe una brecha de orgasmos entre hombres y mujeres; la investigación también ha demostrado que las mujeres tienen más probabilidad de llegar al orgasmo masturbándose que teniendo sexo. Esto quiere decir que mientras los hombres quieren que su experiencia al masturbarse sea lo más parecido al sexo, las mujeres buscan algo en los juguetes que muchas veces el sexo no les puede dar: un orgasmo.Pero hay algunos en la industria que tienen ideas diferentes en cuanto a por qué los juguetes de aspecto realista siguen dominando el mercado masculino. "El mercado de los juguetes sexuales para hombres no es muy sofisticado", dijo Stuart Nugent, gerente de comunicaciones de marca de LELO, una fábrica de juguetes sexuales de lujo. "Los productos anatómicos prevalecen porque los diseñadores de juguetes sexuales para hombres no se preocupan igual que por los juguetes sexuales femeninos, lo que significa que el mercado parece ser impulsado por la demanda de dispositivos anatómicos, pero la verdad es que es impulsado por los fabricantes, no por los clientes".
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