¿Se comerá China a los fabricantes de toda la vida en Android?
Es sabido por todos que los terminales Android del lado asiático del mundo, China están cada vez más a la orden del día. Son más y más las marcas que apuestan por estos dispositivos de grandes prestaciones por un precio reducido. Los usuarios cada vez buscan más el ahorro en estos lares y, lejos de obtener algo de baja calidad como muchos presuponen, muchos de ellos superan con creces a las marcas de toda la vida.
En Enero se confirmaba el destronamiento de Samsung por Huawei en España y la creencia de que los terminales asiáticos eran de peor calidad se ha ido desmintiendo con el tiempo de la mano de marcas que apuestan por la calidad como OnePlus y su increíble 3T y el muy bien acogido Mi 5, un auténtico gama alta de los chicos de Xiaomi. ¿Veremos la caída de las marcas de siempre?
Bajo precio por bastante calidad
Si bien es cierto que hay multitud de marcas desconocidas que, debido a su bajo coste produce miedo sólo ver tremendos smartphones, muchas marcas se esmeran por colarse en el mercado occidental intentando romper estos preceptos apostando por una calidad y prestaciones muy superiores a su precio. No tenemos que irnos muy lejos para confirmar esto: fijémonos en el Honor 8, submarca de Huawei y un diseño que por unos 400 euros, es bastante impresionante.
Esto se une al hecho de que no todas las marcas tradicionales están haciendo las cosas muy bien. Las estrategias comerciales de HTC lo están llevando a la ruina y ninguna empresa se libra de sus históricos fallos, como el fiasco del LG G5 o el desastre del ya difunto Galaxy Note7. Esto lastra la imagen de seriedad que poseen estas marcas, haciendo que se produzca una fuga de compradores que apuestan por lo que ofrecen en el otro lado del mundo. ¿Un Snapdragon 821 y 4 gigas de RAM por menos de 400 euros --el Mi5S--? Sí, por favor.
La distinción vende
El último precepto que podría desbalancear la cosa puede ser la falta de identidad de la que algunos pecan. Pongamos algunos ejemplos: Xiaomi se distingue por ser móviles bien construidos por un precio casi absurdo para lo que ofrecen, y por ejemplo OnePlus ofrece gamas altas con un rendimiento apabullante, y un hardware completísimo por un precio más que razonable, aparte de tener un nombre por detrás. Si bien Samsung posee sus pantallas curvas y su tecnología AMOLED, puede no ser suficiente para encandilar a los usuarios que buscan algo económico.
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Samsung, para mi gusto, peca bastante en sus precios. Sí, son buenos terminales, pero estos costes se disparan en todas sus gamas ofreciendo algo que podríamos encontrar en otras marcas y mercados, además de tener bastantes fallos de hardware, y una política de actualizaciones pésima. Por su parte, Huawei cada vez sube más sus precios sin ofrecer algo determinante subiéndose al carro de los fabricantes tradicionales, y no voy a comentar nada sobre los de Cupertino más que sus ganancias distan mucho de sus tiempos de gloria.
Puede que sí... O puede que no
Puede que esto se pueda resumir de esta manera: esta situación va en evolución constante, por lo que no veremos un cambio radical en este sentido hasta algo más tarde, pero si las marcas tradicionales no ofrecen lo que realmente demanda el público y no buscan nuevas formas de atraer al gran público podemos ver una verdadera invasión china en lo que a nuestros Android se refiere. Basta con dar algo que busque la gente, y ellos lo tendrán y solventar todos sus fallos.
¿Crees que veremos el final de las marcas occidentales?
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