El otoño se terminó, el año está a punto de terminar y estamos metidos de pleno en el invierno. Los días son cortos y fríos y necesitamos soluciones para mantener un ambiente agradable y cálido sin subir varios grados la calefacción. Estos cinco consejos, prácticos y divertidos, nos pueden ayudar:
- El mayor enemigo de un hogar cálido es el aire frío del exterior. La solución es sellar de la forma más hermética posible las ventanas y puertas por las que se puede colar alguna corriente de aire.
Por otro lado el invierno es la estación perfecta para hacer cocinar y especialmente para hornear. Los deliciosos aromas harán que la casa cuente con un ambiente agradable y cálido. Además, dejar la puerta del horno abierta después de cocinar aumenta la temperatura en la cocina o comedor.
En una tarde fría resulta ideal quitarse algunas capas de ropa y acurrucarse en el sofá con la pareja, con los niños o incluso con una mascota. Nada desprende tanto calor natural como otro cuerpo. Los abrazos son buena fuente de calor y añadir una manta suave y caliente puede ser la mejor elección.
Entrar en calor moviendo el cuerpo también es una buena opción: bailar, sacar la esterilla de yoga o subir a la bicicleta estática son propuestas atractivas para conseguir el objetivo, aumentar la calidez.
Pero, por encima de todo, el calor es un sentimiento. Hacer el interior agradable y acogedor automáticamente hace que el calor interno aumente. Velas, alfombras y cojines son elementos de decoración que le dan un toque de calidez al hogar. Los acentos de color también pueden tener un gran impacto.
Tal vez algunas de estas ideas no se te habían ocurrido y sin embargo son todas muy sencillas y fáciles de poner en práctica, así que ya sabemos como tenemos que cerrar y que abrir el año, horneando cosas ricas, haciendo deporte y abrazados a los que más queremos... Vida sana y más calor de hogar es nuestro deseo para 2017. Que disfrutéis de la noche y... ¡Feliz Año Nuevo!
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