Descubriendo el piragüismo: entrevista a Omar Calzón

Hablar de piragüismo es hablar de uno de esos deportes considerados minoritarios en España en cuanto a repercusión mediática y publicidad nos referimos. Sin embargo, en España contamos con grandísimos campeones en diferentes modalidades que sólo son noticia cuando consiguen una medalla o algún hito reseñable.

Nombres como Manuel Busto, Herminio Menéndez, José Ramón Díaz Flor, José María Esteban Celorrio o Luis Gregorio Ramos Misioné, por desgracia pueden ser totalmente desconocidos para el público en general, y sin embargo son nombres que han ido haciendo del piragüismo un deporte que poco a poco nos ha ido dando alegrías a nivel internacional.

Entrevista a Omar Calzón: Medallista nacional e internacional del piragüismo español

Omar Calzón es Presidente del Alberche Kayak Club, Vicepresidente de la Federación Madrileña de piragüismo y Seleccionador de la Federación Española de piragüismo en la modalidad de Maratón. Además, ha participado en los Juegos del Mediterráneo y posee 27 medallas nacionales y cuatro medallas internacionales. Además, compagina su afición al piragüismo y sus compromisos deportivos con su trabajo como militar el Grupo de Seguridad del Cuartel General del Aire.

Háblanos un poco del piragüismo para quien no lo conozca

Es un deporte minoritario en España, con pocos recursos y en el que el tema del patrocinio está realmente muy complicado. Aquí (en la Federación Española) tenemos principalmente cinco patrocinadores: La Liga Four Sport, Iberdrola (que se encarga de patrocinar los apartados relacionados con la mujer y el deporte y la acción social), Loterías del Estado (que se encarga del patrocinio de los paralímpicos), Grupo Caliche y Toyota.

La Federación Española dedica gran parte de los ingresos que obtiene en hacer vídeos en streaming con el fin de reportar publicidad y beneficios a sus patrocinadores.

En España, por ejemplo, tenemos al piragüista asturiano Manuel Busto, que cuenta con un palmarés espectacular (en las categorías de K-1 y K-2) con diez oros mundiales (además de seis oros europeos), cuatro platas (más dos platas europeas) y un bronce pero del que sólo la gente del mundo del piragüismo sabemos su existencia, y tener a un campeón así y que no tenga repercusión, es muy triste.

Por desgracia, más allá de las medallas que ha ido consiguiendo el piragüismo español, este deporte se ha conocido más últimamente por la polémica generada en torno a Manuel Busto y Bea Manchón en Julio de 2017 cuando quisieron competir en el Descenso del Sella en la categoría mixta del K-2, pero que por la reglamentación no pudieron hacerlo.

¿Cómo y cuándo comenzaste a practicar piragüismo, siendo un deporte de los llamados minoritarios en España?

Soy asturiano, y allí, en Asturias, existe una fuerte cultura en lo que se refiere al piragüismo. Es el deporte rey, por así decirlo, y cuando comencé a practicarlo, a los doce años, "era lo que había".

En comparación con otros deportes como el fútbol o el baloncesto, ¿cuesta mucho abrirse camino en el mundo del piragüismo?

Siendo objetivos te diría que no. El problema viene dado al ser un deporte individual, que se mide por ciclos (un ciclo olímpico son cuatro años) y en el que los recursos se destinan a quienes obtienen resultados: hay generaciones muy buenas que tienen la desgracia de llegar al piragüismo en pleno apogeo de una generación que está logrando medallas y resultados, por lo que no tienen acceso a los recursos y patrocinadores, que van a parar a quienes están inmersos en un ciclo olímpico, por ejemplo, para que sigan obteniendo resultados.

Los recursos existentes van para quienes llegan a las finales, y normalmente suelen ser unas 30 personas las que están compitiendo en los campeonatos por traer una medalla para casa. Entonces, si los pocos recursos de que dispone la Federación son para quienes están en esos campeonatos, el resto tienen que buscarse la vida, y eso es verdaderamente complicado en este deporte.

Por poner un ejemplo: en este año (2017), las Becas ADO, que normalmente se pagan entre los meses de enero y febrero, se han pagado a finales de octubre. Imagínate todos esos atletas durante casi un año sin su beca, el perjuicio que les ha supuesto. Por no hablar de que piragüistas como Saúl Craviotto o Marcus Cooper han visto reducidas sus becas en 30.000 y 12.000 euros respectivamente.

¿Qué es lo más difícil en la vida de un piragüista?

Sin duda buscar patrocinadores. Normalmente los patrocinadores que se consiguen son a nivel nacional, pero conseguir patrocinadores a nivel individual es muy difícil.

También resulta difícil compaginar tu trabajo con el piragüismo, ya que en España no se puede vivir de este deporte por la falta de "cultura piragüista" que hay y la falta de apoyos. Hay mucho piragüista que es Policía Nacional, y de hecho el CNP está bastante implicado con ellos facilitándoles la compaginación de su puesto en el cuerpo con las competiciones de piragüismo.

¿Es difícil conseguir patrocinadores en un deporte como el piragüismo?

Como te decía, a nivel individual sí es bastante complicado. A nivel Federación, ésta contrata a un encargado de realizar un "Estudio sobre el retorno de la inversión", mediante el cual se le detalla qué beneficios va a obtener si invierte en el patrocinio. Pero a nivel individual sólo consiguen patrocinadores los que consiguen medallas.

¿Cómo es la preparación física y mental de cara a una competición?

A nivel físico, a principios de año vemos las competiciones que hay y en las que vamos a participar, y en función de eso programamos los microciclos y macrociclos (en los que incluimos semanas de carga y descarga) para lograr los picos de forma que nos permitan encarar las competiciones en las mejores condiciones de lograr medallas o títulos.

A nivel psicológico, hay quienes trabajan con la ayuda de un psicólogo, aunque también ayudan las competiciones previas con los resultados (buenos y malos) de cara a las grandes competiciones.

¿Qué es lo más duro a lo que puede enfrentarse un piragüista?

Hay cuatro momentos que pueden ser realmente difíciles cuando alguno de ellos te ocurre:

Caerse de la piragua: esto supone un gran pérdida de tiempo, ya que no es lo mismo, por ejemplo, caerse de una bicicleta que de una piragua.
La rotura de una pala: cuando esto te ocurre, directamente tienes que retirarte, y es un golpe anímico muy duro porque significa perder todo aquello por lo que has estado luchando los meses previos.
Sufrir una pájara: nadie, en ningún deporte, está exento de sufrir una pájara en plena competición, y cuando te llega, tienes que saber dosificar muy bien tus fuerzas porque de lo contrario te vas a hundir en la clasificación.
El momento de la salida en piragüismo es crucial, y un error en la salida puede hacerte perder la competición: en la salida, las piraguas están "frenadas" por una especie de cepo, y dar una palada antes de tiempo significa que el cepo va a evitar que salgas y te va a "rebotar" hacia atrás, y normalmente cuando te ocurre esto, casi de forma inmediata se produce la salida, por lo que pierdes unos metros muy valiosos de cara a conseguir el título o la medalla por la que ibas a luchar.

¿Quién o quiénes son los referentes del piragüismo español, los que han ido abriendo el camino?

Sin duda alguna, el equipo del K-4 olímpico de los Juegos Olímpicos de Montreal de 1976 que logró la medalla de plata, formado por Herminio Menéndez (dos medallas de plata en K-4 y K-2 500 y una medalla de bronce en K-2 1000), José Ramón Díaz Flor, José María Esteban Celorrio y Luis Gregorio Ramos Misioné (medalla de bronce en K-2 1000 junto a Herminio Menéndez) son los pioneros en el piragüismo a nivel nacional y los que abrieron el camino en España en este deporte.

En el panorama actual, podríamos mencionar a David Cal (primer oro olímpico en las olimpiadas de 2004, en las que consiguió el doblete en categoría C-1 500 y C-1 1000, además de conquistar medallas en los Juegos Olímpicos de 2008 y 2012 y ser el mayor medallista español de la historia en piragüismo), el dúo formado por Saúl Craviotto y Carlos Perez Rial (que consiguió el oro en los Juegos Olímpicos del 2008 en K-2 500) o Maialen Chourraut (primera medalla de oro olímpica en categoría slalom en los Juegos Olímpicos de 2016) son los nombres más reseñables del piragüismo español.

¿Cómo ves el presente y el futuro del piragüismo español?

Siendo sinceros, lo veo con optimismo. Por suerte está habiendo cada vez más apoyo a deporte minoritarios y gracias a la gestión de la Federación Española (en el 2017 hemos ganado el Campeonato Mundial por Federaciones siendo la mejor federación a nivel mundial en función de los resultados obtenidos) cada vez estamos consiguiendo mejores resultados.

Por contra, veo que de cara al futuro peligran las disciplinas no olímpicas, que casualmente son las que más medallas nos han proporcionado a nivel mundial, ya que las ayudas que se reciben suelen ir únicamente para las disciplinas olímpicas.

¿Qué crees que haría falta para que se hablara del piragüismo español más allá de cuando se consigue una medalla?

Salir en televisión más a menudo (risas). "Si no sales en la televisión, no existes". Salir en televisión significaría un aumento enorme en cuanto a patrocinios se refiere, y sin duda eso ayudaría muchísimo a las generaciones que vienen detrás empujando con fuerza a no perderse en el camino por falta de patrocinios.

Y por último, una pregunta obligada: ¿Campeón del Mundo o Campeón Olímpico?

Campeón Olímpico sin ninguna duda. El Campeonato del Mundo lo puedes perder en un año. Campeón Olímpico lo eres durante cuatro años.