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Els set gorgs (Campdevànol, Girona)

domingo, 16 de octubre de 2016

Les sept gorgs (Campdevánol, Girona)
Les sept gorgs


Les sept gorgs (Campdevánol, Girona)
Les sept gorgs


Les sept gorgs (Campdevánol, Girona)
Les sept gorgs


Les sept gorgs (Campdevánol, Girona)
Bosque de Boj


Les sept gorgs (Campdevánol, Girona)
Gorg del Colomer


Muchas veces los lugares que visito aparecen un poco por casualidad cuando preparo un viaje. En el caso de Els Set Gorgs la razón del descubrimiento fue tener que cancelar este viaje por Cataluña y retrasarlo un año. Revisando las notas del año anterior sobre un mapa y buscando fotos de un pueblo cercano apareció una de una pequeña cascada que me llamó la atención. E investigué, claro.

En esta zona de la península la población se articula en torno a los valles y grandes vías de comunicación, así que cuando te planteas una ruta raras veces te vas a desviar de tu camino, y en mi caso se trataba de ir desde la Costa Brava hasta Andorra, así que hice un pequeño desvío por aquí para conocer este sitio. Y mereció la pena.

Campdevànol es un pequeño pueblo cercano a Ripoll, el valle donde se originó la Cataluña que hoy conocemos, ya que tiene una gran vinculación con la fundación de la Casa de Barcelona. Tanta es su vinculación que aquí está enterrado Wifredo, el Velloso, el último conde nombrado por los carolingios y que con sus maniobras políticas consiguió hacerse con varios de los condados catalanes y aprovechar la debilidad del Imperio para consolidar su poder.

A pesar de su aislamiento esta zona era lo que se llama una tierra de nadie, donde ni musulmanes ni lo que quedaba de las poblaciones romana y visigoda se establecían. Fue en época de Wifredo cuando finalmente este territorio fue ganado al menguante poder sarraceno.

A pesar de ello, sigue siendo una  zona muy poco poblada y puedes tener una idea de lo que era el terreno en aquellas épocas.

Lo primero, para visitar Els Set Gorgs (los siete estanques) hazte a la idea de que vas a tener que pagar y que no va a ser barato, al menos si lo haces en los meses de verano: el aparcamiento ha sido restringido por el ayuntamiento en varios kilómetros y han tenido la gentileza de dejarte un parking al módico precio de diez eurazos con una barrera que se levanta previo pago, sin personal humano.

La otra opción es ir hasta una quesería que hay más adelante y aparcar en las escasas plazas de las que dispone. Este es un párking para clientes y es una quesería muy modesta. Si vas a ocupar una de sus plazas no seas rata y cómprales algo. En mi caso fue un queso de oveja que costó sobre... 10 euros. Caro, pero artesanal, con una alimentación de primera para los animales y el propietario es un chico muy majo que insistió varias veces en que no era necesario que le comprase nada.

Pero oye, ya que fue tan amable y yo ya iba mentalizado para pagar no quise echarle morro. Le compré el queso (que por cierto, estaba excepcional) y me fui a recorrer el camino de Els Set Gorgs. Hacéos a la idea de que vais a patear a gusto: desde la quesería hasta el inicio del camino hay un buen paseo.

Una cosa más. Desde el parking hasta las cascadas el camino va por un lado del río y desde la quesería por otro (y es mejor el de la quesería).

Els Set Gorgs es el típico riachuelo, el Estiulà, que se va deslizando por una montaña caliza, salvando unas pequeñas caidas y haciendo unos pequeños lagos. Por lo visto en verano, los días de calor, estos estanques son frecuentados por gente del pueblo y de otros lugares que vienen a bañarse o a hacer senderismo. Cuando yo fui era un día nublado y fresquito y aún así había alguna gente en los diferentes rincones que recorrí, aunque por lo que tengo entendido el lugar está bastante concurrido en temporada alta.

El sendero, una vez que abandonas la pista forestal, está bien señalizado y es muy agradable, muy accesible excepto en alguna zona puntual, caminando entre bosques de pino y de boj (me sorprendió ver tanto boj, sobre todo porque hasta ese día sólo lo había visto en jardines) y salvando ocasionalmente el  río en varios vados en los que no tuve ningún problema para cruzar. Por orden, estos son los siete saltos de agua

Gorg de la Cabana
Gorg de la Tosca
Gorg de L'Olla
Gorg de la Bauma
Gorg del Forat
Gorg Petit del Colomer
Gorg del Colomer

El último de todos es el más espectacular. Por lo que he leído en otros blogs la carretera llega bastante cerca y la gente puede aparcar por allí, lo que contribuye a que sea uno de los más concurridos. Si es así siempre os podéis plantear dejar el coche ahí y hacer el recorrido al revés, hasta el primero de los saltos y luego volver.

En el mapa os puse el camino desde Campdevànol hasta la quesería y luego hasta lo que (creo) es el inicio del sendero.

El Mapa
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Besalú (Girona, Cataluña)

domingo, 4 de septiembre de 2016

Puente de Besalú (Girona, España)
Puente de Besalú


Puente de Besalú (Girona, España)
Puente de Besalú


Besalú, Girona
Puente de Besalú


Besalú, Girona
Calle de Besalú


Besalú, Girona
Iglesia de Sant Vincenç


Iglesia de Besalú (Girona, España)
Monasterio de Sant Pere


La N-260, también conocida como "Eje Pirenáico" es una de las carreteras españolas que más me gustan. Sin haberlo buscado resulta que la he recorrido casi totalmente y algún día escribiré un post sobre ella con enlaces a los lugares más interesantes por los que pasa y que haya visitado (no paré en todos).

Cuando haga eso seguro que pongo un enlace a Besalú, una de las poblaciones más famosas por las que pasa y también una de las más interesantes.

Besalú se encuentra en la comarca de La Garrotxa, concretamente en la parte conocida como la Baja Garrotxa, una de las pocas zonas de origen volcánico medio reciente que quedan en España y donde se han contabilizado hasta 38 conos. Para su estudio y protección se declaró un Parque que abarca unas 12 mil hectáreas. Es una zona muy verde y con muchos bosques que van desde los típicos bosques mediterráneos a otros de tipo atlántico. Por desgracia no pude visitar nada de esto, aunque pude verlo desde la carretera.

Volviendo a Besalú, la villa guarda un casco histórico de gran valor, fruto de su influencia durante la Edad Media, su prosperidad y su elemento más distintivo han dependido desde siempre (primero como fuente de ingresos, después como reclamo turístico) de su puente con peaje, que sirve para cruzar el río Fluvià.

Aunque hoy sea un municipio minúsculo, de menos de 5 km2, Besalú fue durante la Edad Media un importante centro político, capital de su propio condado en los tiempos en que los francos fueron perdiendo interés en su Marca. Este condado conoció sus momentos de más influencia tras la muerte de Wifredo, el Velloso, el primer conde independiente de Barcelona y a este condado se uniría Besalú tras la muerte sin hijos del conde Bernat III.

Por Besalú pasa una rama del Camino de Santiago, la que rodea los Pirineos por el sur, y esa fue una de las razones de su prosperidad, ya que el Pont Vell o puente viejo, cuenta con una característica torre que servía tanto para cobrar peaje a quienes lo utilizaban, como para proteger esa entrada de la ciudad de cualquier fuerza invasora.

El Pont Vell tuvo una historia bastante movidita, con una serie de reparaciones y reconstrucciones que afectaron a su edificación original que, por lo que sabemos, hasta puede haber sido en otro sitio ya que hay restos de otro puente un poco más arriba. La última reconstrucción importante tuvo lugar durante el siglo XX, ya que durante la Guerra Civil dos de sus arcos fueron volados y fue necesario reconstruirlos.

No sé si las fuertes riadas que de vez en cuando bajan de los Pirineos han causado grandes daños en el puente desde entonces, pero tampoco sería raro: no es la primera vez que el puente no es capaz de resistir toda el agua que baja desde los Pirineos.

Al pasar por aquí el Camino y tener cierta importancia la población en San Julián hubo un hospital de peregrinos. Hay que tener en cuenta que un "hospital" en aquella época era más un alojamiento que un establecimiento dedicado a tratar enfermos, aunque era lógico que los peregrinos que necesitasen atención se quedase hasta curarse (o ser enterrado).

También tuvo su judería, de la que se conservan los baños (miqvé), a los que se accede pagando una pequeña entrada y que da derecho visitarlos con guía y también se ha recuperado parte de lo que fue un día la Sinagoga ya que no se conserva prácticamente nada de ella.

Lo que sí que se ha perdido es el castillo. Pocos restos quedan del mismo. Originalmente estaba en lo alto del cerro pero hoy en día poco o nada queda de sus fortificaciones. Al parecer pasó de ser una pequeña fortaleza a ir ampliándose y añadiendo nuevos edificios. De alguna manera Besalú es la evolución de su castillo y aunque la villa que hoy conocemos no tiene mucho que ver con la que era en aquellos años sí que conserva parte de sus edificios y de su trama urbana, lo que le ha valido la calificación de Conjunto Histórico-Artístico Nacional desde 1966.

El Mapa
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    Cadaqués (Girona, Cataluña)

    domingo, 14 de agosto de 2016

    Cadaqués (Girona, España)
    Cadaqués


    Cadaqués (Girona, España)
    Badía de Cadaqués


    Cadaqués (Girona, España)
    Badía de Cadaqués


    Cadaqués (Girona, España)
    Badía de Cadaqués


    Port Lligat, Cadaqués (Girona, España)
    Port Lligat


    Faro de Cap de Creus (Cadaqués, Girona)
    Faro de Cap de Creus


    Este es uno de esos pueblos que publico en este blog con un poco de reticencia. A estas alturas no creo que haya mucha gente que necesite descubrir Cadaqués, ya que su vinculación con Dalí y su fama debido a este y a otros ilustres visitantes, lo convierten en un pueblo bastante conocido, además de que para muchos es una de las imágenes más emblemáticas de la Costa Brava.

    Y si os digo la verdad, a mi ni fú ni fa.

    Y viendo las fotos que acompañan este artículo tal vez estéis pensando algo así como "¿pero qué dice este tío?".

    Por partes. Si nos vamos al extremo opuesto de la pequeña bahía de Cadaqués y vemos el pueblo, con sus casas blancas, reptando por el terreno ondulado en el que se asienta, con esa agua turquesa justo delande y creemos que estamos viendo alguna estampa del paraíso.

    El problema es cuando paseas entre esas mismas casas y ves que en realidad es bastante soso todo, iglesia incluída. Reconozco que yo parto con dos hándicaps importantes: que soy gallego y tenemos cascos antiguos monumentales y que el día anterior había visitado Pals, Peratallada y Monells, que juegan dos divisiones por encima de Cadaqués.

    El nombre de Cadaqués (Cap d'Aquès) significa "Cabo de Rocas". Y la verdad es que el nombre es bastante apropiado ya que toda la zona de Cap Creus es bastante rocosa. Rocosa y pelada, ya que los vientos que soplan constantemente dificultan la creación de bosques, un fenómeno que he visto en otras zonas costeras y ventosas como Cabo Peñas en Asturias o Camariñas en Galicia. Esa roca y ese viento son los que hacen que esta parte se la más brava de la Costa Brava.

    Estando tan aislada Cadaqués (lo que supone que su dialecto del catalán sea un tanto peculiar), algunas familias ricas de Cataluña se fijaron en ella para pasar sus vacaciones, buscando una tranquilidad que en otras zonas más pobladas no iban a tener. Más adelante, algunos artistas llegaron a la villa y la convirtieron en un lugar de gran importancia en el mundo de la cultura: Dalí, Lorca, Picasso, Miró, Duchamp y otros pasaron por el pueblo o fijaron su residencia, permanente o estacional, en Cadaqués o sus alrededores, como Port Lligat y su preciosa ensenada.

    Si visitáis en Cadaqués os puede interesar visitar la Casa Museo de Dalí, en Port Lligat, o dar un paseo por el casco antiguo. Dentro de la iglesia hay un retablo barroco de gran valor y unas vistas de la bahía que son de lo mejor que puede ofrecer la población.

    Una cosa más. A diferencia de muchos otros pueblos se puede bajar con el coche y hasta os puede interesar explorar un poco en busca de aparcamiento, porque el de pago que hay a la entrada es una auténtica sablada. Creo que si váis por las calles que comunican Cadaqués con Port Lligat podéis encontrar algo de aparcamiento. Podéis explorar un poco con Google Street View si queréis para buscar algún sitio donde podáis dejar el coche sin sobresaltos.

    El Mapa
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    Monells (Girona, Cataluña)

    domingo, 7 de agosto de 2016

    Monells (Girona, Cataluña)
    Monells


    Monells (Girona, Cataluña)
    Monells


    Monells (Girona, Cataluña)
    Plaza de Monells


    Monells (Girona, Cataluña)
    Monells


    Monells (Girona, Cataluña)
    Monells


    Monells (Girona, Cataluña)
    Monells


    Monells (Girona, Cataluña)
    Monells


    Tras haber visitado Pals y Peratallada ahora toca visitar el tercero de estos tres pueblos que son casi vecinos y que cada uno, por separado, ya merecen una visita.

    Monells, por desgracia, tuve que visitarlo a toda velocidad. Una tormenta y una lluvia bastante fuerte tuvieron la culpa. Y para colmo de males en la plaza alguien puso un enorme reflector, supongo que para grabar un programa de televisión en alguna de las casas.

    Aparqué en las afueras del pueblo porque a orillas del río creo que sólo pueden aparcar los vecinos. Y estuve a punto de volverme. No veía nada especial desde el puente e incluso las casas que daban al Rissec parecían grises, tristes y vulgares.

    Y es todo lo contrario. Es como si, a diferencia de otros muchos sitios, Monells viviese a espaldas de su propio río, cosa un poco extraña si lo comparo con lo que he visto a lo largo de mis viajes. Vale que es un río estacional que seca durante buena parte del año, pero en el terreno es un poco raro.

    Por lo que sea y ya que estaba allí decidí dar una vuelta. Y entonces fue cuanto Monells se abrió ante mí como una flor por la mañana.

    Una vez que te adentras en sus calles ves que se trata de un pueblo hermoso, con unas plazas, soportales, fachadas y rincones realmente bonitos. Me sorprendió lo macizo y grueso de los muros, mucho más fuertes de lo que recuerdo en Peratallada o Pals y auténtica seña de identidad de Monells.

    El pueblo se articuló en torno a un castillo este ya no existe, conservándose únicamente parte de las murallas. Aún así, toda esa sensacion de medievalidad por la que es famoso el pueblo se conserva plenamente. Tal vez en mi caso, al estar casi totalmente desierto cuando lo visité, sin duda a causa de la lluvia, esta sensación se acentuase.

    Y debió ser un castillo importante ya que aunque hoy Monells comparta municipio con los vecinos Sant Sadurní y Cruilles, en la Edad Media su mercado tenía tanta importancia que Jaime I, el Conquistador, decretó que la unidad de medida para los cereales en el obispado de Girona fuese la mitgera de Monells. No me preguntéis a qué equivale, porque no tengo ni idea.

    Para aquellos que hayan visto la película Ocho Apellidos Catalanes tal vez alguna de las fotos le suenen de algo y es que esta película fue rodada aquí

    El Mapa
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      Peratallada (Girona, Cataluña)

      sábado, 18 de junio de 2016

      Peratallada, Girona
      Puerta de la muralla


      Peratallada, Girona
      Peratallada, Girona


      Peratallada, Girona
      Calle con raíl para carros


      Peratallada, Girona
      Peratallada, Girona


      Peratallada, Girona
      Peratallada, Girona


      Peratallada, Girona
      Peratallada, Girona


      Girona es una de las provincias españolas que más interesantes me han parecido y sólo la lejanía entre mi Pontevedra natal y el extremo noreste peninsular me ha impedido conocerlas antes.

      Cuando pensamos en Girona posiblemente lo primero que nos vengan a la cabeza sean la Costa Brava y los Pirineos, pero lo cierto es que la provincia ofrece mucho más que eso.

      Por ejemplo, cuando pensamos en pueblos pintorescos normalmente lo primero que nos viene a la imaginación sean algunos pueblos castellanos con su arquitectura tradicional y su castillo, pero lo cierto es que por toda la península hay verdaderas maravillas que han llegado hasta nuestros días y estando algunas en un estado de conservación maravilloso. Pues en Girona están algunos de los más bonitos que he visto. Y lo más curioso, es que los tres que más me han gustado son vecinos entre sí.

      El primero de estos pueblos, Pals, está relativamente cerca de la costa y es fácil de encontrar. Lo hemos visto en nuestra ruta anterior. Peratallada, en el municipio de Forallac, es el siguiente, un poco más al interior.

      Como pasa en muchos pueblos pintorescos de Cataluña las plazas de aparcamiento para los visitantes son de pago, y en este caso no tuve tiempo ni ganas de ponerme a investigar. A pesar de ello y ya que mi visita fue breve, no me cobraron. Las tarifas tampoco las recuerdo como excesivas, pero en cualquier caso si ayudan a la conservación de esta joya bien pagadas están. Hay dos aparcamientos en extremos opuestos del pueblo.

      Peratallada es uno de esos pueblecitos cuya historia parece haber quedado atada al medievo y conserva ese sabor plenamente, siendo hoy en día su principal atractivo e industria. Pasear por Peratallada es un pequeño lujo que no disfruté lo suficiente y que consiste en callejear con calma mientras rincón a rincón, esquina a esquina, arco a arco tu retina se va deleitando con una pequeña y casi interminable colección de imágenes únicas. Llegaba un momento en que no sabía si parar de fotografiar o seguir disparando. Decidí lo segundo, y en algún caso eso salvó a algun detalle de ser recordado por una foto mediocre.

      Peratallada me recordó a algunos de los pueblos que había visitado el año anterior en Mallorca, con esas paredes de caliza y esas calles empedradas, con esos elementos vegetales incorporados a las fachadas. Resulta increíble que lugares como Lloret de Mar, perfecta antítesis de lo que es Peratallada, estén en la misma provincia.

      Del castillo que fue Peratallada no queda gran cosa. Apenas restos de una torre y algunas de las puertas de la ciudad, y sobre todo, de lo que fue su foso, excavado en la misma roca y que posiblemente sea el origen de su nombre: "piedra tallada". Algunos de los inmuebles del interior de la población, sobre todo aquellas más pegadas a la torre, parece que formaron parte de sus dependencias.

      No hay mucho que decir acerca de su historia y parece que salvo una ocasión en la que la señora del castillo tuvo sus más y sus menos con los campesinos de la zona, que casi quemaron el edificio, no tuvo demasiada relevancia en los diferentes episodios bélicos que asolaron la región a lo largo de la historia.

      Prueba de ello es que el castillo perteneció a la misma familia, los Cruïlles, desde el matrimonio de uno de ellos con la heredera de la dinastía fundadora hasta que lo subastaron a principios del siglo XX. Creo que ahora mismo sigue estando en manos privadas, en otra familia noble.

      La puerta que está al lado de la carretera principal es quizás la más bonita, con un pequeño puente que salva el foso. La foto que acompaña al artículo es una recreación vía edición fotográfica, de lo que debió ser el castillo en tiempos: borré los elementos modernos que encontré, como una pared de chapa, varias antenas, carteles, señales o el mismo asfalto. Así que no contéis con encontrar el lugar tal cual aparece.

      Al otro lado de la carretera se encuentra la Iglesia de Sant Esteve, un imponente edificio románico, solitario, que contrasta con la abigarrada colección de casas pintorescas que es la Peratallada intramuros. Según parece esta iglesia habría sido construida durante el siglo XII, momento en el que aparecen los primeros testimonios de su existencia, y en ella están enterrados numerosos Señores de la localidad, sobre todo de la familia Cruïlles.

      Para mi es uno de los pueblos más bonitos de la península y es pecado pasar por la provincia de Girona y no acercarse a conocerlo. Merece mucho la pena, igual que otros pueblos cercanos del Baix Empordà como Palau Sator o Ullastret.

      El Mapa
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        Pals (Girona, Cataluña)

        domingo, 8 de mayo de 2016

        Pals (Girona, España)
        Pals, Girona


        Pals (Girona, España)
        Pals, Girona


        Pals (Girona, España)
        Muralla de Pals, Girona


        Pals (Girona, España)
        Torre de Les Hores, Girona


        Pals (Girona, España)
        Pals, Girona


        Pals (Girona, España)
        Pals, Girona


        Cuando se habla de los pueblos medievales de Cataluña normalmente se hace mención de tres de ellos, de gran importancia arquitectónica, con un maravilloso estado de conservación y muy cercanos entre sí. Hablo de Pals, Peratallada y Monells, en el Baix Empordà.

        Según vienes de la costa, de Begur o Palafrugell, el primero de ellos sería Pals y os puede servir de inicio de una pequeña ruta que os lleve a visitar los tres.

        En la parte de "El Mapa" además de la localización habitual que añado en cada artículo voy a añadir una ruta entre los tres pueblos, con visitas a otros dos de los que no voy a hablar (en parte porque no tengo fotos en condiciones) y que bien merecen un paseo, como Palau-Sator y Ullastret. Tal vez algún día me decida y les haga una pequeña reseña en mi otro blog, Viajes por Iberia. Son 30 kms de ruta, así que no hay excusa para visitar sólo uno de los pueblos.

        El centro urbano de Pals, de origen medieval, es un auténtico espectáculo de caliza rojiza y con una riqueza de elementos arquitectónicos y estética tremenda, todo ello culminado por la Torre de las Horas, una guinda románica a un pueblo donde predomina el gótico. Ventanas, arcos, balcones, casonas, fachadas con cubierta vegetal... lo que se dice un pueblo de cuento, rodeada por una muralla con cuatro torres cuadradas que tienen su origen en el siglo IV.

        Pals es uno de esos pueblos en los que no hay que recomendar nada. De hecho, es uno de esos sitios donde lo que importa es el conjunto y no algún elemento en particular. Puedes ir a ver la Torre de les Hores, puedes ir a ver la Iglesia de Sant Pere o las murallas, pero nada de eso destaca sobre el conjunto, un auténtico lujo para aquellos a quienes nos gusta callejear por estas pequeñas maravillas que han sabido sobrevivir al paso del tiempo y de las modas.

        No es extraño que hoy en día la pricipal industria de Pals sea el turismo, tanto el que es atraído a la cabecera de su término municipal como aquellos que van a la costa, que no he visitado. Insisto en lo espectacular del centro histórico. Las fotos que acompañan este post no le hacen justicia.

        Buscando información sobre la costa descubro que aquí el mar ha retrocedido  en esta zona e incluso alguna localidad cercana, como Torroella, que en tiempos de Roma era puerto de mar hoy está varios kilómetros tierra adentro. Me hubiese gustado ver las dunas de la playa de Pals, pero amenazaba tormenta y tenía interés en ver también Peratallada y Monells.

        Históricamente hablando parece que Pals ya estaba habitada en tiempos de Roma y su nombre podría derivar de Palas Atenea. El castillo aparece documentado ya en el siglo IX, con el nombre de "Mont-Àspre" y estuvo vinculado a los Condes de Barcelona y otros señores, como el obispo de Girona.

        El castillo fue destruido durante una rebelión campesina y la Torre de les Hores es lo único que se conserva de él. Los restos del edificio fueron empleados, tras la rebelión, en reconstruir las murallas y la Iglesia

        Como curiosidad final mencionar que en Pals se cultiva arroz. Cuando pasé por esta zona me sorprendió ver campos inundados, sobre todo teniendo en cuenta que venía de recorrer una parte de costa bastante seca.

        Por cierto, si os molesta el hecho de que el aparcamiento en las cercanías de la ciudad vieja sea de pago siempre podéis aparcar un poco más lejos, en la parte nueva y dar un paseo. No es mucho más lejos pero os ahorráis unos duros, aunque hay que tener en cuenta que el dinero recaudado por estos parkings redundan en la conservación de este lugar tan espectacular.

        Es una forma como cualquier otra de poner en valor y obtener recursos para que esta parte de nuestro patrimonio siga existiendo. Después de ver otros lugares, como Guimerà o el muchísimo más famoso Belchite, por ejemplo, donde la falta de presupuesto impide conservar adecuadamente el legado que tienen, no puedo culparles.


        El Mapa
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          Costa de Palafrugell: Llafranc y Tamariu (Girona, Cataluña)

          lunes, 25 de abril de 2016

          Llafranc, Palafrugell (Girona)
          Llafranc, Palafrugell


          Llafranc, Palafrugell (Girona)
          Llafranc desde el Far de S. Sebastià


          Tamariu (Palafrugell, Girona)
          Tamariu, Palafrugell


          Tamariu (Palafrugell, Girona)
          Tamariu, Palafrugell


          Tramadiu (Palafrugell, Girona)
          Tramadiu, Begur


          Uno de los trozos de costa más conocidos y promocionados de España es la Costa Brava, ese tramo de litoral que va desde Blanes a la frontera con Francia y dodne hay un poco de todo, desde auténticos desastres como Lloret de Mar (es difícil calificar de otra cosa a un pueblo donde se han cometido tantos despropósitos en tan poco espacio) hasta tramos absolutamente vírgenes como las costas de Cap Creus, donde la naturaleza ha mantenido alejados a quienes ven pecado dejar un metro sin cemento.

          Y dentro de los lugares donde la gente ha conseguido aprovechar el entorno con gusto podemos encontrar Palafrugell, cuya costa me ha parecido una pequeña joya, con lugares de difícil acceso y que no son demasiado conocidos por la gente que pasa por aqui de forma casual. Dicho de otra forma, si vas a Palafrugell mejor documéntate antes o pasarás de largo sin ver algunas de sus maravillas.


          Aunque hay mucho más para ver (os recomiendo hacer alguna de las rutas de senderismo que recorren la costa), voy a centrarme en un par de lugares del municipio.

          El primero sería Llafranc, un pequeño pueblo de pescadores que ha sabido subierse al tren del turismo sin dejar de ser lo que siempre ha sido, sin perder su esencia. Llafranc destaca por sus casitas integradas en el entorno, entre los pinos, escalando por las paredes rocosas que descienden hasta la playa donde puedes ver las barcas de pescadores varadas en la arena, algo que se ha perdido en demasiados sitios, donde estos oficios tradicionales y que daban sentido a las poblaciones se han arrinconado, como si molestasen. Es famoso el festival de habaneras de Llafranc, que se celebra en agosto

          Desde Llafranc podemos subir hasta el faro de San Sebastià. Ya el camino merece la pena con sus vistas, pero las que hay desde arriba son espectaculares. De nuevo recomendaros que investiguéis un poco: yo estuve en el faro y no sabía nada ni de la torre de vigilancia ni del poblado íbero que hay allí. Me lo perdí. Me enteré mucho tiempo después. Como podéis ver en la foto las vistas son un auténtico lujo, con la comarca del Baix Empordà luciendo en todo su esplendor.

          Un poco más adelante, siguiendo la costa hacia el norte, está Tamariu. Es un pueblo de pescadores más humilde que el de Llafranc y cuya pequeña playa también está ocupada parcialmente por las barcas. Tan humilde es que a principos del siglo XX nadie vivía aquí y sólo había casetas para guardar los aparejos de pesca.

          Hoy en día la principal industria de Tamariu es el turismo y su punto fuerte son las actividades náuticas. Deportes como el paddle surf, el submarinismo o la vela son ofertados por el club náutico local. Una de las rutas de senderismo de las que hablaba antes y que os recomendaba une a Tamariu con Llafranc. Es un buen paseo, pero hay acceso a playas que de otra forma no serían accesibles, así que merece la pena.

          A donde no se puede llegar ni caminando, o al menos no tengo noticia de ello, es a la de Tramadiu, ya en el vecino municipio de Begur. No tengo mucha información sobre esta cala y la poca que pude encontrar está en catalán (y aunque usualmente entiendo el idioma me temo que no he tenido mucha suerte con los pocos artículos que he encontrado

          Otro sitio que no he visto, e investigando para escribir este post parece que me he perdido algo interesante, es Calella de Palafrugell, un poco antes de Llafranc. El hecho de que la carretera desde Cala Castell en Palamós no siga bordeando la costa (cosas del terreno) me hizo saltármela. Al parecer es otro antiguo pueblo de pescadores que también ha sabido adaptarse al turismo y al menos en las fotos que he visto y un pequeño paseo por Google Street View su aspecto desde el mar y la playa es fantástico

          El Mapa
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          Cala Es Castell (Palamós, Girona)

          domingo, 24 de abril de 2016

          Cala Es Castell (Palamós, Girona)
          Cala Es Castell, Palamós


          Cala Es Castell (Palamós, Girona)
          Cala Es Castell, Palamós


          Cala Es Castell (Palamós, Girona)
          Cala Es Castell desde el poblado


          Sa Foradada (Palamós, Girona)
          Cala Corbatera y Sa Foradada


          Hasta que llegué a Cala Es Castell, en Palamós, la Costa Brava estaba siendo una decepción para mi. Esa costa salvaje y virgen que tenía en mi imaginación era más bien una sucesión de pueblos y calas implacablemente destrozados por un tipo de turismo que no respeta el entorno si no que lo parasita, destruyendo la misma belleza que explota. O explotada con desgana, construyendo miradores donde no hay nada que mirar y evitando construirlos en lugares donde no hay posibilidad de parar y admirar unas vistas extraordinarias.

          Algo así debieron pensar en su día los habitantes de Palamós porque cuando a mediados de los noventa les preguntaron si querían construir un campo de golf con toda su parafernalia asociada en las cercanías de esta playa votaron de una forma clara, con un 70% de los participantes opuestos al proyecto.

          Y eso ha permitido que esta playa llegue hasta hoy en buenas condiciones. Hay que decir que dispone de un aparcamiento amplio y de pago (si bien cuando fui no había nadie para cobrar). El bosque que se interpone entre donde dejas el coche y el arenal te da un poco de tregua los días de mucho calor con una sombra muy agradecida.

          Más allá del aparcamiento hay una sucesión de bosques y de campos explotados por los vecinos y te permiten imaginarte como debió ser el resto de la costa antes de la explosión del turismo. No es de extrañar que en algunos sitios de los que he consultado aparezca como la mejor playa de la Costa Brava. No sé si será el caso, pero desde luego merece la pena la visita.

          El arenal es bastante abierto, un poco empinado según se mete en el mar y el agua está fría para tratarse del Mediterráneo, al menos a finales de junio, con algunas pequeñas construcciones (creo recordar que una servía de bar, pero no le presté mucha atención) a pie de playa, estando una de ellas tan a pie de playa que las olas mojan las paredes. En el extremo opuesto otra debió ser originalmente una instalación de pescadores, tal vez una antigua factoría de salazón, porque tenía una rampa bastante amplia hasta el mar. Alguna casa discretamente ubicada un poco más arriba en la colina y parcialmente oculta entre los pinos es toda la concesión que queda a la actividad humana.

          Según sigues hacia la costa norte entras en un bosquecito de pinos entre los que discurre un sendero, remontando por el acantilado, desde donde hay las mejores vistas de la playa.

          Y un poco más adelante hay los restos de un antiguo poblado íbero (no me salió bien ninguna foto de allí, una lástima) en el cabo que cierra el arco de la playa.

          Y justo aquí hay otro de los puntos interesantes de este lugar: la cala de Sa Corbatera o Cala Cobertera, con la roca conocida como Sa Foradada, justo a los pies del poblado. Es un lugar muy apreciado por los canoistas que van por esta zona para darse un paseo y acceder a una calita donde no hay otra opción que acceder desde el mar.

          El Mapa
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