Nos hacemos adictos por supervivencia

24 marzo 2014


La investigadora francesa Brigitte Kieffer es uno de esos científicos que abren la puerta a nuevos territorios. Su descubrimiento de los receptores de los opiáceos inició un camino que está dando sus frutos. En el año 1992 descubrió el gen que codificaba los receptores de los opiáceos y desentrañó los mecanismos por los que calman el dolor y, a la vez, producen dependencia. Tuve ocasión de hablar con ella en París antes de la entrega de los premios L'Oreal Unesco. "Los humanos siempre estamos buscando recompensas, porque es parte de nuestro sistema de supervivencia basado en la recompensa y el castigo", me contó. "Es muy básico: si recibes un castigo no lo harás más, si te gusta lo harás otra vez. A los animales les pasa lo mismo, no sé si has visto esos vídeos de monos que se emborrachan… Es natural. Que sea patológico depende de la cultura, los hábitos, la herencia genética... No todo el mundo se convierte en adicto".

Leer la entrevista completa en: "La adicción provoca una modificación irreversible del cerebro" (Next)