Killer Instinct Season 3 [NB Labs]

Xbox One – Windows 10 Iron Galaxy Studios Microsoft

Año 2013. Microsoft anuncia que Killer Instinct está de regreso y todo es alegría. Luego, se anunció que Killer Instinct seguiría un modelo de venta extraño y que provocaba -y sigue provocando- rechazo y la alegría inicial se transformó en duda. ¿Por qué Microsoft hace esto? ¿Por qué Killer Instinct no puede ser como siempre? ¿Por qué no podemos tener cosas buenas?

Año 2016. Cómo ha cambiado todo.

Más y mejor contenido

En cuestiones concretas, la temporada arranca con cuatro personajes bastante variados y diferentes entre sí, o al menos lo suficiente como para que los jugadores más veteranos tengan horas y horas de investigación. Tusk, Kim Wu, Rash y Arbiter se suman al elenco existente aportando cada uno sus respectivas novedades y a la vez siendo consistentes con lo que ya existe.

En el caso de los “externos”, como Rash y el Arbiter, es interesante su transformación a personajes clase Killer Instinct sin perder un ápice de lo que es la identidad de sus franquicias. Las combinaciones más espectaculares del Arbiter incluyen granadas y riflazos, mientras que Rash aporta extremidades gigantes que de inmediato recuerdan a Halo y Battletoads. Por su parte, Tusk y Kim Wu son extremos totalmente opuestos: el primero es un tanque mega lento que hace mucho daño, mientras que Kim Wu es todo velocidad y combos largos que bien encadenado compensan el relativamente menor daño de los ataques.

¿Mi personaje preferido? Rash, por mucho. No es el peleador más completo y a nivel competitivo es el menos usado de los nuevos, pero su arsenal es bastante completo e incluye la famosa moto de Battletoads. En segundo lugar, el Arbiter cuya implementación es perfecta y el rifle con balas limitadas le da un componente táctico/estratégico bien llamativo una vez dominado el personaje.

Con el pasar de las horas, se hace evidente que Iron Galaxy invirtió bastante tiempo en el diseño y la implementación de todo el nuevo contenido. Las mejoras visuales no son radicales, pero a simple vista se nota una mejora respecto a lo que había antes. Los nuevos escenarios se ven bastante bien, mención especial para aquel basado en Halo que pone en pantalla a varios personajes clásicos de la serie. Y los personajes, los cuatro que existen hasta ahora, no se parecen a ninguno de los existentes a la fecha.

Conclusión: El juego de peleas más consistente

La tercera temporada de Killer Instinct es, en esencia, más personajes y escenarios pero también es la pieza que hace madurar a Killer Instinct como producto. La base como tal nunca ha cambiado y los ajustes, que sí existen, quizás no sean tan evidentes para los que no siguieron su evolución desde el comienzo. Pero llegado marzo de 2016, Killer Instinct es uno de los juegos de peleas más consistentes que hay en el mercado.

La frase “ofrece algo para todos” puede sonar algo cliché, aunque en el caso de Killer Instinct se aplica perfecto porque el juego es realmente atractivo tanto para novatos como para veteranos. Tal vez el sistema de emparejamiento en partidas rankeadas necesita algunos ajustes (es común encontrarse con gente del nivel máximo estando apenas en la categoría bronce), pero más allá de eso no hay mayores detalles que desentonen. Los tutoriales, el modo en solitario, el netcode, el sistema de lobbys, todo funciona muy bien.

Nadie hubiera pensado hace dos años que Killer Instinct escalaría tan alto. Y ahí está ahora, junto a Mortal Kombat, mirando al resto hacia abajo.

En 2016, Killer Instinct es un de los juegos de peleas más consistentes que hay en el mercado.

Versión de Xbox One analizada. Copia de revisión facilitada por Microsoft.